Federico:
En Mateo 12,43-44, Jesùs habla de un viento inmundo que se va y vuelve y compara lo que le pasa a esa persona con lo que le pasarà a la mala generaciòn.
Jesús proyectó lo que acontece en la vida integral del hombre cuando ha sido liberado de un «viento inmundo» que lo haya poseído.
Jesús termina comparando que «así también sucederá a esta perversa generación», la actual, desde sus días, que experimentará lo que ha de venir que hará colapsar al sistema humano o «mundo».
Si espiritualmente estamos bien y por diferentes motivos «nos distanciamos del Padre y empezamos a cometer actos que desagradan a Dios», pues lo obvio es que esos actos desagradables a Dios motivarán resultados afines a los sembrado.
Desde luego que en una situación así actuarán esos «vientos inmundos».
La «casa espiritual» de la que habla es el espíritu, alma y el cuerpo de la persona.
Ello puede exponerse hacia el prójimo de ese creyente.
Todo repercute …
FGuttmann
