Todo el mundo estaba lleno de maldad y de violencia, y solo Noé quien ya había sido pregonero de justicia, estaba con Dios; en Hebreos se dice que esto fue por la fe, o sea que Noé ya había escuchado acerca de estas cosas que llegarían, como lo supo su padre Lamec cuando dice «Este nos aliviará de nuestras obras y del trabajo de nuestras manos, a causa de la tierra que Jehová maldijo».
Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre
En los días de Noé ya había sido transferido vivo a los cielos Enoc, el séptimo desde Adán. Prefiguró a la congregación de Jesús que será arrebatada a los cielos al sonar la séptima trompeta, antes que venga la catástrofe sobre el mundo actual, lleno de violencia y de maldad.
Enoc 93.9 Luego, en la séptima semana surgirá una generación perversa; numerosas serán sus
obras, pero todas estarán en el error.
10 Y al final de esta semana serán escogidos los elegidos como testigos de la verdad
de la planta de justicia eterna. Les será dada sabiduría y conocimiento por septuplicado.