Felipe:
Una persona puede «reclutarse» en el Cuerpo de Cristo a semejanza como lo hace quien se integre, por ejemplo, en el ejército.
(1) «El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí» (Mat 10:37-38 R60)
(2) Hay que «nacer de nuevo» aceptando las condiciones de ese «Cuerpo». (3) Hay que obedecer a quien aceptemos como «Señor» y «Rey».
Hace 6 años «naciste» en una congregación, de las innumerables que existen, sin embargo, comentas, que no entendías lo que decían los «profetas», que hoy a los 25 años de edad recién comienzas a entender, y por ello quieres «nacer de nuevo como corresponde.»
Debes «nacer de nuevo» como lo indica Pablo: «resucitar con Cristo», y no bajo influencias ajenas o diferentes: «Si, pues, habéis resucitado con Cristo».
Las personas que «nacen con Cristo» se caracterizan porque «buscan las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios», porque «ponen la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra», porque entienden que han «muerto» a los valores del mundo, y que sus vidas están «escondidas con Cristo en Dios» (Col 3:1-3 R60).
Bien haces al tener la esperanza de experimentar el arrebatamiento y por ende de participar en las bodas del cordero, sin embargo no deseches si a cambio puedas recibirlo cuando venga de regreso a reinar, aunque pierdas esa oportunidad de descender con él.
Si una congregación de corte «cristiano» no se dedica a hacer «discípulos» para que el Señor de entre ellos escoga a sus siervos, entonces esa agrupación no está bajo el señorío de Jesús.
FGuttmann.
