Respuesta a: La rebelión de Satán

Yanina:
Horacio de alguna manera ahora se está contradiciendo, aceptando que esa «marca» si será a manera de un microprocesador o «chip». De ello se trata mis aportaciones en esa temática. Que quien no lo tenga no podrá hacer ningún tipo de transacciones financieras. Lo que Horacio ni se imagina es que el «chip» inoculado debajo de la piel ya existe desde hace años, por ejemplo, en los animales, en ciertos enfermos, como los que sufren Alzaheimer, en muchas personas potencialmente secuestrables, y en ciertos personajes importantes de la «alta» sociedad, y que en ese tiempo el proceso de ese «sistema» ha sido mejorado y al mismo tiempo han «acostumbrado» a la humanidad acerca del beneficio y necesidad de ese sistema. En internet existen suficientes informaciones al respecto, emanadas de todo tipo de personas que al respecto se han manifestado, sobre todo en los últimos diez años.

En el caso de los EEUU, iniciarán implantando ese microprocesador, precisamente en la mano derecha y en la frente, en las personas que han de necesitar los servicio de salud. Excelente excusa y oportunidad para «acostumbrar» a la sociedad no solo norteamericana, sino mundial, a aceptarlo, y así evitarse futuras reacciones de la comunidad oponiendose a ese sistema que en lo siguiente se prestará para fines de seguridad y luego para los asuntos financieros, sin necesidad de extraerlo y volver a implantarlo.

La Biblia no habla de «señal».

Ninguno en el mundo entero podrá «comprar ni vender» sin tener implantado ese microprocesador. Ello empezará tanto en USA como en Europa y luego seguirá rápidamente a las demás naciones altamente comprometidas con los mercados comerciales internacionales. Ello marcará lo que muchos llaman el «Nuevo Orden Mundial» o ahora en Europa como la «nueva estructura económica».

Su proceso se conocerá en tres etapas: la tal «marca» o «chip»; el nombre de ese sistema (llamado «la bestia»), y el número del «nombre» de ese sistema («Bestia»).

Juan comenta que acerca de ese tema «hay sabiduría». Sabiduría con respecto al significado de los números desde la perspectiva hebrea.
«El que tiene entendimiento» al respecto, dice Juan, que «cuente», no que calcule» como enseña Horacio, «el número» que identificará a ese Sistema (la Bestia), porque «es número de hombre». Y en cuanto a «su número» completo en el mundo, este se conocerá porque se leerá como «seiscientos sesenta y seis».

Contar significa tener en cuenta las tres veces que se expresará el número 6. Un seis identificará la «marca» o «chip»; otro seis el «nombre de ese sistema (llamado «la bestia»)», y el tercer seis al «número del «nombre» de ese sistema («Bestia»).

Primero se dará al servicio el seis que tiene que ver con la «marca» o «chip»; luego el que tiene que ver con «el nombre de ese sistema (llamado «la bestia»), y por último el que está relacionado con el «número del «nombre» de ese sistema («Bestia»).

Una vez se aprecien las tres «etapas» o estén en pleno desarrollo entonces se comprenderá que esos tres números están en acción irreversible: 666. Este identificará al nuevo sistema mundial que tendrá control en todos los aspectos sobre la humanidad.

Revisa lo que Horacio al respecto escribió y notarás que ha variado su posición al respecto a raíz de las aclaraciones de Camino Luz, y de eso se trata de que nos edifiquemos en beneficio de todos, porque de no hacerlo ponemos en riesgo nuestra vida en términos de eternidad.

FGuttmann.