Arturo Paiz:
Jesús subía a ciertos montes para hablar (lat. «orar») aparte, y ciertamente que «para buscar a Dios no hay necesidad de subir a los montes», pero Jesús, en esas ocasiones, subió a esos montes para encontrarse y hablar («orar aparte») con mensajeros de las Alturas comprometidos directamente con su misión.
En cuanto a «buscar a Dios», lo conveniente, primeramente, es despejar a cuál «Dios» buscamos, porque hay muchos (1Co. 8.5-6), y segundo, tener en cuenta esa exhortación de Pablo: «¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Viento de Dios mora en vosotros? (1Co 3:16).
No existe una sola versión, en ningún idioma, que sea 100% fidedigna.
FGuttmann.