Silvio:
La palabra griega «koluthentes» («koluo») puede significar prohibir, prevenir, impedir o dificultar,
Biblia de las Américas (1986), NVI (1979) traducen «impidió».
Reina Valera prefiere el vocablo «prohibir».
Hech. 16:6-11 reseña tres formas de presentación del organigrama del Altísimo:
«Pasaron por la región de Frigia y Galacia, habiendo sido impedidos por el Espíritu Santo de hablar la palabra en Asia, y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu de Jesús no se lo permitió. Y pasando por Misia, descendieron a Troas. Por la noche se le mostró a Pablo una visión: un hombre de Macedonia estaba de pie, suplicándole y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos. Cuando tuvo la visión, enseguida procuramos ir a Macedonia, persuadidos de que Dios nos había llamado para anunciarles el evangelio.»
(1) «impedidos por el Viento Santo de hablar la palabra en Asia».
(2) cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu de Jesús no se lo permitió.
(3) «Cuando tuvo la visión, enseguida procuramos ir a Macedonia, ———–persuadidos de que Dios nos había llamado para anunciarles el evangelio.»
El cómo ellos, Pablo y Timoteo, escuchaban al «viento sagrado» (Hech. 16:6: «les fue impedido por el Viento Santo»), es asunto que ellos mismos les corresponde explicar, porque de hacerlo yo, ¿cómo lo demuestro sin un previo contexto?
Toda información es recibida mediante el uso de los sentidos, si es audible o tactible, dependerá del oído o del tacto, pero de una u otra manera ha de llegar a la mente dond funciona la consciencia.
Para saber quién es el «viento sagrado» discierne de lo que te informa, por ejemplo, Heb. 1.14.
En cuanto a dónde está, pues, depende porque en algunos está en su vida, en su actuar (1Co. 3.16; 6.19).
FGuttmann