Alonso:
En relación a “los que fueren tenidos por dignos de alcanzar —-aquel siglo——– y la ——resurrección de entre los muertos——–, ni se casan, ni se dan en casamiento. ———-Porque no pueden ya más morir——-, pues son iguales a los mensajeros, y son hijos de Dios, al ser hijos de la resurrección” Lucas 20: 34-35).
Viene sobre este mundo un «siglo» liderado por Jesús. No todos los vivientes de esta morada, ni de los que habitan en esos otros siete planetas, serán considerados «dignos» para vivir en ese milenio, porque antes de ese evento muchos fallecerán para resucitar después del milenio, para asistir al «juicio del trono blanco».
Jesús lo advirtió y Juan lo reseñó (Jn. 5:28-29): «No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando TODOS los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación».
La resurrección de entre los muertos en algunos ya ha acontecido y acontecerá en tres ocasiones más: primero resucitarán los muertos en «Cristo» que asistirán a las bodas del cordero en calidad de «esposa». Resucitarán porque «hicieron lo bueno», por ello «saldrán a resurrección de vida.
La segunda resurrección sucederá al regresar Jesús con los suyos tres años y medio después del arrebatamiento. Saldrán a vida eterna solo los que estén en el «seno de Abraham».
Los demás, los que Jesús llama «sepultados», resucitarán después del milenio y asistirán al juicio del trono blanco para recibir su condenación eterna. Las excepciones serán reintegradas a la sociedad redimida. «Los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación».
FGuttmann.
