Javier Elias:
Satán, llamado La serpiente por la manera como actuó y por su «veneno», información tergiversada, engañó a la varona por ser ella quien engendraría hijos, no solo de su vientre sino en lo que correspondería a la educación de ellos y de su descendencia, de ahí el significado del nombre que le puso después Adam, HEVAH, o «matriz de ese género» (Heb. Gen. 3.20).
Si Satán dañaba a la varona, siendo ella la ayuda «idónea» del varón, esta «asesora» afectada nefastamente, dañaría al varón asesorándolo erróneamente.
Ello exactamente sucedió…
FGuttmann
scosa que no puede hacer el varón.