Carlos:
Varias explicaciones existen de esa palabra, ‘cobertura’. Una congregación o ‘iglesia’, como cualquier otra entidad o empresa debe tener cobertura jurídica de cara al gobierno y a la sociedad para efectos de responsabilidades. Cada persona que trabaja o que presta sus servicios a una entidad se debe sujetar a los lineamientos de esa empresa, pero según lo maneja el costumbrismo evangélico, estar bajo la sujeción o autoridad supuestamente espiritual de un semejante o de una congregación con más fama o prestigio, obviamente no es ‘bíblico’, si se trata de seguir a Jesús, porque la verdadera cobertura de un seguidor de Jesús es el Padre, Jesús y el ‘viento sagrado’. Las personas animadas por lo religioso suelen sujetarse ‘espiritualmente’ a quienes consideran ungidas por el Señor y les agrada sujetarse a estas, que «les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de corrupción. Porque el que es vencido por alguno es hecho esclavo del que lo venció» (2Pe 2:19 R60).
FGuttmann.
