Eloah, Elohim y el «Drágon»

Leonardo:
No te inquietes si algo no queda claro porque se trata de ir despejando el tema que no deja de ser complejo.
Para investigar algo debes definir qué exactamente te inquieta, que quieres saber, es decir, ¿qué verdad buscas?
FGuttmann

Leonardo:
Quien siembra suele preparar primero el terreno, y debe saber con anterioridad qué semilla siembra, asimismo le corresponde saber que tiempo ha de esperar para la cosecha, pero si le es viable ha de cuidar ese proceso, para que no se le malogre la cosecha. Esa es la ley del sembrador, sin embargo, si ARRIBA deciden acelerar procesos, cualquier experiencia puede acontecer en un ambiente o en una persona o en un colectivo.
Nos corresponde, entre tantas «verdades», conocer la que tiene que ver con nuestra vida en términos de eternidad.
Animos.
FGuttmann

Mauricio:
No nos es relevante si existen negocios que se identifiquen con logos de dragones cuando tenemos a la China que incluso celebra algunas de sus fiestas con ese simbolo.
En estos tiempos seguirá viendose señales en los aires.
Los videos acerca de Genesis son parte del menu de la Universidad y del Instituto Biblico.
La decanatura administra ese material.
FGuttmann

Hiryu:
La voz «adámicos» ha sido traducida como «hombres» y como «humanos».
Jesús es el primer ADAMICO («primogénito»), primero de la genética ADAM.
Satán es uno de los tantos adámicos que existen y que hayan existido, asimismo sus seguidores, sean monarcas (siete), sean «príncipes» o sean mensajeros.
Los 24 monarcas también son adámicos.Juan no les llamó «ancianos». Les identificó con la palabra griega «presbíteros» que no significa «ancianos». El traductor traduce esa palabra «presbíteros» como «ancianos» con base en que en la Grecia antigua un «anciano» era una persona veterana en los asuntos administrativos sociales y no necesariamente eran «ancianos» en cuanto a vejez, sino en el sentido de persona experimentada en ese asunto «político».
Para el caso, la visión de «hombres ancianos con barba» entrados en años y viejos es el resultado de costumbrismos.
En la vida eterna el adámico no envejece.
Si envejeciera viviría viejo eternamente.
FGuttmann

Yanina:
Al respecto existen tantas informaciones y contra informaciones que logran especulaciones que no conducen a algo edificante. Todo indica, sin embargo, que hay cosas en ese orden de vivientes adámicos que residen debajo de la tierra y las potencias lo saben. En cuanto a ciudades subterráneas obviamente existen y muchas. No todas están sujetas a Satán ni saldrá alguna a «reinar» en este planeta después del arrebatamiento.
No existen las tales «leyes espirituales». El término «espiritual» es latín, así que bien vale la pena evaluar cualquier información o vocablo que proceda de este idioma para cotejarlo con el griego o con el hebreo, si la «Biblia» es el punto de partida. Existe una ley magna de la cual se desprenden innumerables leyes y los terrenales apenas si conocemos algunas. Si quieres ahondar en el tema de las civilizaciones más antiguas te sugiero que sigas investigándolo en internet pero no creyendo todo. Si todas estuvieran en contra nuestra no estaríamos ni sobreviviendo.
Te sugiero y recomiendo escudriñar todo lo que tenga que ver con lo que viene y sopesar tu situación futura porque de poco te servirá saber de estos temas de cara a ese futuro que incluye tu vida en términos de eternidad.
Toda información es útil sin embargo hay unas que tienen que ver directamente con nuestro futuro y bien vale la pena atenderlas.
FGuttmann.

Dimer:
La «palabra», entendemos que la de «Dios», dices acertadamente, que «tiene que ser revelada», y ello precisamente ha acontecido, ha sido revelada o dada a conocer en su totalidad por Jesús. A sus seguidores, entonces, les es mandatorio darla a conocer a los demás, como Jesús les delegue. Si sus seguidores de este Siglo XXI cuentan con la tecnología que nos acompaña, la de las comunicaciones, entonces han de aprovecharla, porque sería ridículo que trataran de enviarla por medio de nubes de humo o reescribirla en papiros o vitelas.
No es una recomendación o sugerencia sana ni justa, ni la más apropiada, intentar o motivar a las gentes a que se limiten y menos en cuanto a indagar, investigar o escudriñar lo que consideren, o en otras palabras, todos debemos buscarle al gato las cinco patas a ver si las tiene, si es lo necesario con tal de acceder a la libertad, y esta se logra conociendo la verdad y la verdad revela cosas del gato que ni nos imaginamos.
Recibimos tu número de contacto, pero la temática que expones debe presentarse en público, para edificación de los demás, y así sabremos todos quien está bajo la luz y quien debe ajustarla, para su propio beneficio, porque lo que menos debemos hacer es poner en riesgo nuestra vida eterna.
«Examinadlo todo; retened lo bueno.» (1Ts. 5:21 R60)
FGuttmann