La rebelión de Satán

EduardoAD:

Saludos desde Barranquilla, en unos días desde Miami, después desde México:

Eze. 26. 27 menciona a las «hijas» de TZOR (Opositor) -refiriéndose a Satán-.

El vocablo «hijas» hace referencia a las filiales o diferentes colectivos o agrupaciones resultantes de las gestiones del imperio satánico.

FGuttmann

Aura:
Desde la rebelión de Satán, la humanidad bajo su regencia ha estado supeditada a los plenipotenciarios o poderosos de esos imperios que surgieron de esa insurrección.
Desde la perspectiva griega son llamados «dioses».
Esos vocablos, «dios-dioses»- forman parte del léxico y de ciertas costumbres de aquellas naciones influenciadas por el imperio griego que existió bajo el liderazgo de esos llamados «dioses griegos del Olimpo».

No entiendo, sinceramente, tu mensaje en cuanto a que no sabes si posiblemente no es una profecía actual sino del pasado lo que no aclaras. De todos modos, una profecía no es algo actual.
Una profecía es una advertencia, un anuncio del algo que ha de suceder. Si es actual ya no es profecía, es un suceso presente. Una profecía no pertenece al pasado, sino al futuro.
Antes de las guerras entre Católicos y Luteranos existieron innumerables enfrentamientos sobre la faz de este planeta y en otros.
No entiendo a qué profecía te refieres cuando escribes que «aceptamos esa profecía como futura».
Como no precisas en relación a qué «no hay pasado», pues, como complicado llevarte el hilo del tema que quieres compartir.
Aunque Miguel sea hombre y pueda cometer fallos, de todos modos no cometerá aquellos que no cometió, y por ello está donde está, de comandante de las fuerzas de Yehovah.
Muchos han muerto, muchos están muriendo, y muchos morirán en este y otro escenario, hasta que regrese Jesús, y aún estando presente Jesús muchos más morirán.
Olvidate que Satán será salvo.
Te equivocas al decir que «no es cuestión de luchar contra ese ser».
Por el contrario, ya le llegó la hora a ese ser, y a quienes le secundan, experimentar el enfrentamiento más fuerte, radical y extremo que jamás haya vivido desde que se opuso a Dios y a su creación de vivientes.
Creer en los milagros es bueno, pero mejor cuando se hacen evidentes.
Aunque para bien has sido un milagro de Dios, ello no implica que la realidad en la que vivimos se alteró por ello.
Cuando todos podamos expresar ese amor al que te refieres, entonces, será otro el escenario, pero por ahora la realidad nos exige madurez, sensatez, templanza, conocimiento de causa, y todo aquello que contrarreste la ignorancia.
La Biblia reseña que ————–a los israelitas———solo a los israelitas——– se les dijo a través de esastablas : «No matarás», y sin embargo a quien desobedeciera le matarían y así sucedió.
Deut. 17:2-7: «Cuando se hallare en medio de ti, en alguna de tus ciudades que Jehová tu Dios te da, hombre o mujer que haya hecho mal ante los ojos de Jehová tu Dios traspasando su pacto, que hubiere ido y servido a dioses ajenos, y se hubiere inclinado a ellos, ya sea al sol, o a la luna, o a todo el ejército del cielo, lo cual yo he prohibido; y te fuere dado aviso, y después que oyeres y hubieres indagado bien, la cosa pareciere de verdad cierta, que tal abominación ha sido hecha en Israel; entonces sacarás a tus puertas al hombre o a la mujer que hubiere hecho esta mala cosa, sea hombre o mujer, ————–y los apedrearás, y así morirán———.
Por dicho de dos o de tres testigos ——————–morirá————– el que hubiere de morir; no morirá por el dicho de un solo testigo. La mano de los testigos caerá primero sobre él ————-para matarlo——-, y después la mano de todo el pueblo; así quitarás el mal de en medio de ti.»
Es tiempo de que aterrices, mujer.
El idealismo solo conduce a desaciertos.

FGuttmann

Josue:
No todos se confunden al saber lo que aclara la Biblia, a la luz de la fuente hebrea, acerca de Satán y su linaje adámico.
Los que se confunden son aquellos que se tragaron el cuento católico romano acerca de las características de Satán, que no aparecen en ninguna fuente, sino como las proyectó el costumbrismo religioso católico romano, que heredó el Protestantismo y sus variantes.
De ahí andas aferrado, sin constatar algo al respecto.
Dios me pedirá cuentas si no aclaró lo que dice la Biblia según sus fuentes aramea, hebrea y griega koiné, y no aferrado a una de tantas versiones de la Biblia que entre sí ni se ponen de acuerdo.
Demuestra que estoy equivocado,si lo estoy o si no deja de presentarte sin argumentos que refuten mi posición.
Demuestra que son mentiras …»en gran parte» lo que aduces.
Deja de ser un «Acusador» que esa posición no es de los seguidores de Cristo.
Aprovecha esta oportunidad y demuestra con la fuente que te guía cómo es entonces Satán.
Hechos … muchacho… que a estas alturas de los tiempos no todos tragamos entero de tradiciones.
FGuttmann

Leslie:

Nuestra morada, al igual que otras siete, están enmarcadas en una realidad asquerosa, inaceptable en el resto de la creación de los vivientes, semejantes todos y todos procedentes del mismo código genético, el ADAMICO.
En estos tiempos se están definiendo las cosas planteadas en tres escenarios, y nos encontramos inmersos en ese desenvolvimiento, unos para bien y otros para mal. Pero todos en términos de eternidad, unos para participar en ella y otros sin poderlo hacer nunca más.
Es delicadísima nuestra situación, extrema y altamente decisiva.
En medio de este holocausto llevamos las de perder, a menos que sigamos a la única persona que nos puede llevar donde corresponde: Jesús, nuestro hermano mayor.
El problema es que Jesús no puede decidir en nuestras vidas, a menos que nosotros se lo permitamos.
Y si se lo permitimos, entonces debemos obedecerle.
Jesús no está enmarcado en alguna religión, ello no existe en la creación, solo en el ambiente satánico.
La solemnidad ha sido contaminada por la religiosidad, en donde se experimenta.
La música y muchas de las expresiones adámicas también sufrieron desenfoques desde los días de la rebelión.
La rebelión, como su nombre lo dice, todo lo trastornó, lo desdibujó, lo desarraigó para en su lugar imponer las leyes que rigen a los animales.
El adámico-animal no ajusta donde la armonía de los adámicos se enseñorea sobre el género animal.
Nosotros, los adultos, fuimos también niños y muchachos jóvenes; todos somos hijos, así que si pudimos conocer de la salvación, ello indica que la juventud actual también puede acceder a esa verdad.
Solo es asunto de estrategias, de métodos y de sensatez y de honestidad, lo que no tienen muchos líderes religiosos, que actúan como los políticos, llevados por los afanes de vida que dicen rechazar.
Más de la mitad de nuestra morada está sumida en la crasa ignorancia, con respecto del acceso que tiene a la edificación y a la tecnología una parte de nuestro globo terráqueo.
La mies es mucha, pero los obreros se cuentan con los dedos de una sola mano.
Cualquier sugerencia que pueda aportar, para encaminar a la juventud en el único camino, sería viable si se suman los ingredientes adecuados, no obstante, esos jóvenes proceden de hogares, si es que son hogares algunos de ellos, lo que indica que cada quien, que quiera hacer esa labor, la de encaminarlos a Jesús, debe primero sujetarse a Jesús, y no a los líderes que se presentan como servidores de Jesús, para esquilmar y trasquilar a esas ovejas, que terminan siendo ovejas idiotas a su servicio. Respeto las excepciones, desde luego.
Te recomiendo hablar con Jesús, de tú a tú … y de ese resultado darán testimonios tus frutos.
Tú has llegado a Jesús porque el Padre te recomendó al Señor, y el Señor es quien te llevará al Padre.
Yo me limito a ir a Jesús, así llego al Padre .
FGuttmann

Camilo:
Fuera de este planeta los vivientes adámicos a tu semejanza suelen vivir eternamente, excepto si se les causa la muerte, y Satán es uno de ellos.
Un «espíritu inmundo» es un fallecido que le sirvió en vida a los intereses de Satán.
FGuttmann.

La mente del adámico desligado de su hábitat natural, el universo inconmensurable, le es difícil comprender cómo fue posible que un adámico, para el caso Satán, pudiera lograr un cambio de actitud entre sus semejantes, sobre todo entre siete monarcas y algunos «príncipes» que conformaban el organigrama que lidera al reino «celestial» establecido en el infinito universo o creación, en la cual está nuestro planeta …….. aislado.

Es un hecho que el código genético ADAM está presente en muchas partes de la creación, no solo en este planeta. También es un hecho que en este planeta no inició la vida del código genético ADAM, que llamamos HOMBRE.

Así lo ratificó Jesús: que «nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo; el Hijo del Hombre, que está en el cielo» (Jn 3:13).

De este planeta no surgió el código genético y menos para diseminarse en el universo.

En otras palabras, nadie de este planeta subió al universo para establecer su linaje en el universo.

El código genético ADAM «descendió» del universo, del inconmensurable universo, donde está viviendo desde tiempos anteriores al día cuando algunos de los hijos del reino establecido en el universo o «reino de los cielos», escogieran, entre otros planetas, a esta morada, para que en esta se diera, primeramente, el anhelado engendramiento y el subsiguiente nacimiento del hermano mayor: Imanuel, mejor conocido en ciertas latitudes como JESUS.

Para administrar la morada escogida, los monarcas encargados de esa misión, escogieron a uno de los tantos «querubím». Lo escogieron de ese especial organigrama que depende del organigrama de los monarcas.

Ese «querub», como adámico escogido de entre los suyos, fue «perfecto en todos sus caminos», HASTA que se le ocurrió ser semejante a esos monarcas y regentar como ellos lo hacen.

Ese «querub», a quien conocemos como Satán, nunca lo habría conseguido, involucrar a otros adámicos en su malévolo objetivo, y mucho menos lograrlo en esos siete monarcas que le secundaron. Lo logró porque de manera astuta, como actúa la serpiente, se sustentó en una ley que no es para los adámicos, la ley que rige al género animal.

Al amparo de esa ley, sus seguidores se cubrieron («justificaron»), y como los animales actuaron contra muchos de sus congéneres, para engrandecer su rebelión o cambio de actitud.

Los adámicos, actuando bajo las leyes de los animales, la enfilaron como animales salvajes contra todos aquellos adámicos que no les secundaron y desde ese día provocaron los desaciertos más abominables jamás imaginados en el único mundo hasta entonces conocido, el del Altísimo.

Desde entonces, «lo que sucede a los hijos de los hombres (afectados por la rebelión), y lo que sucede a las bestias, un mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros, y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia; porque todo es vanidad (inestabilidad)».

Todo va a un mismo lugar; todo es resultado del residuo, y todo volverá al mismo residuo. ¿Quién sabe que el viento de los hijos de los hombres sube este arriba, y que el viento del animal desciende este abajo a la Tierra?» (Ecl. 3:20-21).

«Nacer de nuevo» es la única solución para salir del mundo regido por las leyes para los animales. Solo así es posible que el «viento» (lat. «espíritu») de la nueva criatura, en su calidad de «hijo del hombre», suba a las alturas donde están los hijos del hombre.

Arrepentirse es cambiar de actitud, cambiar de ley, pero es necesario sujetarse a otra ley, y la única ley válida es la de «Cristo».

Para acceder a la ley de «Ha Mashiaj» («el Cristo»), es necesario, primeramente, entrar al redil de las ovejas (Jn. 10.1-29), luego ser «siervos» útiles, formando parte de ese «cuerpo» (organización»), el de «Cristo» y allí, si somos fiel en lo «poco», sobre muchas responsabilidades se nos pondrá, en calidad de «esposa» de ese «cuerpo», el de «Cristo».

En ese «cuerpo» solo hay cabida para los «siervos útiles», no allí hay «ovejas».

De ese «cuerpo» saldrán los «amigos» de Jesús.

«Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer» (Jn 15:15).

Quienes se crean «cristianos» y quieran ser ——–amigos de Jesús——-, que se levanten de las sillas «domingueras», que dejen la «pastorlatría», que se sacudan el polvo de la religiosidad, que carguen sus cruces y sigan a Jesús, para que carguen el yugo que lleva Jesús.

«Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga» (Mat. 11:29-30).

Todo cristiano debe tener en cuenta esa advertencia de parte de Jesús, que no todo el que le dice «Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos», sino el que hace la voluntad del Padre que está en los cielos».

Después del arrebatamiento, muchos líderes cristianos, cuando se vean excluidos de las bodas del cordero, le dirán en aquel día: «Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?

¿Qué les declarará Jesús?

«Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad».

Maldad es liderar masas para sentarlas, por años, en las sillas, ofreciéndoles espectáculos, incluso con tintes circenses, y prédicas romántico espirituales, con el fin de tratarlas como sus ovejas y trasquilarles la lana.

La maldad funciona bajo parámetros totalmente ajenos a las leyes del Padre.
La maldad da «vida» al hombre en un medio que no es para el hombre, sino para los animales, por ello un hombre no puede ligarse a su Creador ni a su Hacedor, porque «vive» en un escenario afín a los animales, bajo normativas para los animales, y en ese hábitat cuanto hace no es compatible, no ajusta, no acopla con las leyes que al hombre le son propias.

FGuttmann.